El Grupo S&D tiene mucho interés en desarrollar las relaciones de la UE con sus socios estratégicos mundiales mejorando el diálogo transatlántico y ampliando nuestra relación con Rusia y China de manera constructiva, pero crítica. Al mismo tiempo somos muy activos en la creación de nuevas relaciones con poderes emergentes como Brasil, India y Sudáfrica.

 

Las relaciones transatlánticas

La UE y los Estados Unidos son aliados clave, comparten principios y valores comunes y juegan un papel crucial en la política mundial multilateral. Sin embargo, la naturaleza de la asociación transatlántica está cambiando: Europa ya no es la principal preocupación estratégica de la política exterior de los Estados Unidos. Apoyamos relaciones comerciales y de inversión más fuertes entre la UE y los Estados Unidos que faciliten crecimiento económico y nuevos empleos, que tanto hacen falta a ambos lados del Atlántico. Sin embargo, también creemos que una asociación transatlántica comercial y de inversión global debe incluir condiciones y garantías para garantizar que obtenemos lo máximo posible en nuestros intereses mutuos sin comprometer las normas europeas. 

 

 

Asociaciones estratégicas: Rusia y China

El Grupo S&D apoya una relación constructiva y basada en la confianza entre la UE y Rusia y, aunque criticamos las tendencias negativas de la política nacional rusa, también reconocemos que hay intereses comunes. Seguimos pidiendo una verdadera asociación entre la sociedad europea y rusa, incluyendo una eliminación gradual de los visados. Creemos que la relación entre la UE y Rusia debe basarse en responsabilidades compartidas en nuestra vecindad y a nivel mundial, y seguimos esforzándonos para promover una participación y un diálogo críticos.

La UE es el mayor socio comercial de China mientras que China es la mayor fuente de importaciones de la UE. Es una importante fuente de riqueza, empleo, desarrollo e innovación para ambas partes; pero las relaciones entre la UE y China también tienen repercusión mundial. Subrayamos constantemente los importantes retos que China tiene que superar, incluyendo la seguridad social, los derechos de los trabajadores, las actividades de los sindicatos, la protección medioambiental y los derechos humanos; esos asuntos son una prioridad en el diálogo con nuestros homólogos chinos. En relación con las tensiones regionales en las que está involucrada China, el Grupo S&D destaca que hace falta resolver los conflictos siguiendo las normas y los estándares internacionales.  

 

 

Irán

La situación política en Irán es un asunto internacional sobre el que la UE debe manifestarse con más firmeza. Hemos adoptado una postura coherente, que favorece el diálogo con Irán, para distender las tensiones y resolver los desacuerdos, con la finalidad de llegar a una normalización progresiva de las relaciones. Las sanciones de los Estados Unidos y la UE tienen un impacto social y económico negativo sobre los iraníes y seguimos estando convencidos de que hacen falta medios diplomáticos en lugar de opciones militares para resolver la crisis desatada por el programa nuclear iraní. También hemos apoyado a los activistas iraníes de derechos humanos, Nasrin Sotoudeh y Jafar Panahi, que ganaron el Premio Sájarov a la libertad de pensamiento del Parlamento Europeo en el  2012. 

 

 

América Latina

Pocas regiones del mundo tienen tanto en común con Europa como América Latina. El Grupo S&D comprende el panorama plural, diverso y políticamente cambiante de América Latina y los retos continuos de desigualdad social, pobreza e injusticia social. Seguimos trabajando por un diálogo ambicioso y constructivo y  profundizando alianzas estratégicas con América Latina. Nuestro objetivo es promover la cohesión social y ocuparnos de la desigualdad, apoyar la democratización y los derechos humanos y fomentar el desarrollo sostenible, la protección del medio ambiente y la cooperación regional.

 

 

África

A comienzos del nuevo milenio, la UE lanzó un nuevo diálogo con África que aspira a crear una asociación estratégica con el continente.  En los últimos años, la UE ha respondido activamente a la Primavera Árabe en el norte de África y a los graves desafíos en el Sahel y el Cuerno de África. Las soluciones militares dirigidas a responder a la inestabilidad en esas regiones deben formar parte de una estrategia más amplia que incluya buena gobernanza, desarrollo, medidas humanitarias y, sobre todo, la restauración del imperio de la ley. El Grupo S&D lidera al Parlamento Europeo en el apoyo a los habitantes del África subsahariana, ocupándose de las necesidades humanitarias y de desarrollo y promoviendo los valores de la democracia y la buena gobernanza.