S&D GROUP AFRICA WEEK 2022
The fifth edition of our Africa Week Initiative will take place in Brussels.
From Tuesday 08 to Thursday 10 February 2022.
You will find the regularly updated programme of the Week online and registration details at
https://www.socialistsanddemocrats.eu/events/sd-group-africa-week-brussels-8-9-10-february-2022
S&D GROUP AFRICA WEEK 2022
The fifth edition of our Africa Week Initiative will take place in Brussels.
From Tuesday 08 to Thursday 10 February 2022.
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África ha sido, y seguirá siendo, una prioridad de los Socialistas y Demócratas del Parlamento Europeo. Creemos que África es un socio igual en esfuerzos, aspiraciones y sueños en la lucha contra la desigualdad, con lo cual nuestras acciones deben reflejar esa realidad. La pandemia global de la COVID-19 ha ampliado el azote de la desigualdad en África. La desigualdad y su resolución, agravadas por los viejos desafíos de la pobreza extrema, el hambre y el paro, son nuestro foco principal de preocupación.
Seguimos subrayando que hace falta reforzar más la asociación entre África y la Unión Europea como parte de la solución de estos desafíos. Se están poniendo a prueba nuevas cotas en las relaciones entre África y la Unión Europea, ahora más que nunca. Hace falta trabajar con urgencia, conjuntamente, para abordar la pandemia global y sus efectos. El sentido de la Nueva Asociación se basa, en parte, en la capacidad de pasar esta prueba.
La economía africana está perdiendo miles de millones de dólares en los sectores del transporte y el turismo debido a las restricciones de viaje; las pequeñas empresas se están ahogando debido a la falta de disponibilidad de ingresos a un nivel en el que la mayoría es incapaz de alimentarse a sí misma; las empresas privadas están, en general, debilitadas y cientos de millones de personas han perdido sus empleos. La recaudación fiscal ha afectado a las prestaciones de la mayor parte de los gobiernos, que son incapaces de facilitar bienes públicos, servicios y redes de seguridad a los grupos vulnerables, en el escenario de una agenda social que sea flexible, especialmente en el sector sanitario de la lucha contra la pandemia.
Agravan esta situación los viejos desafíos sin respuesta, incluyendo la obligación de dar respuesta a la cuestión de la población en África, que se espera que alcance los 2.500 millones de personas antes de 2050, y que será predominantemente joven. Esos desafíos magnifican las complejidades en torno a la gestión de la migración, abordando la desigualdad y la creación de empleos dignos. La asociación entre África y la Unión Europea debe ir más allá de responsabilidades y titularidades comunes y tiene que abordar las debilidades que ha mostrado la pandemia global, abrazando la necesidad de inclusión, principalmente garantizando la plena contribución y participación de África en las cadenas globales de valor.
Nosotros y nosotras, los Socialistas y Demócratas, luchamos por un desarrollo sostenible y un crecimiento económico de inclusión que no deje a ningún niño o niña, mujer u hombre atrás. Queremos que Europa, junto a nuestros socios africanos, se enfoque cada vez más en una cooperación política que se centre en las personas, abordando las desigualdades. Creemos que así se responderá a los desafíos de pobreza extrema y paro y ello contribuirá a que África sea un lugar mejor y más sostenible para sus habitantes. En nuestro trabajo diario en el Parlamento Europeo, luchamos para reducir las desigualdades sociales, por una buena gobernanza mejorada y promoviendo la diplomacia del clima, el crecimiento económico sostenible y el respeto de los derechos humanos. Creemos que el éxito de esta renovada asociación entre el África y la Unión Europea puede ser clave de cara a encontrar soluciones a los desafíos globales comunes. No hay tiempo que perder.
Una asociación más madura y contemporánea entre África y la Unión Europea puede ayudarnos a abordar los desafíos comunes que afrontamos. Juntos podemos reforzar la democracia y los derechos humanos e impulsar un desarrollo humano y económico que sea sostenible en nuestras sociedades.
La buena coordinación de las políticas exteriores de la Unión Europea es esencial si queremos sacar el máximo partido a las oportunidades globales que se nos presentan y ser un actor responsable en la escena internacional.
Empoderar a las mujeres
Los derechos de las mujeres son, ante todo, derechos humanos, pero aquellas sociedades en las cuales las mujeres pueden esperar que haya justicia e igualdad de oportunidades son también las más exitosas. Por ello, creemos que capacitar a las mujeres no es solamente una cuestión de justicia, sino que es fundamental para crear sociedades exitosas.
Trabajamos junto a otros socios internacionales para empoderar a las mujeres africanas, defender sus derechos y prevenir la violencia y la discriminación. Nos esforzamos a fin de garantizar que se respetan los derechos de las mujeres, que todas pueden acceder a la educación y que se erradica la violencia contra las mujeres, tanto a nivel legislativo como en la práctica. El Grupo S&D también quiere que el empoderamiento de las mujeres se traduzca en una mayor participación en la vida política de sus comunidades.
Nuestra búsqueda a la hora de fomentar la participación de las mujeres en la matriz de una sociedad global que fuera inclusiva e igualitaria se vio enormemente afectada por el impacto de la COVID-19 en la agenda de desarrollo. Hay que adoptar un enfoque que sea más holístico a fin de combatir el aumento exponencial del trabajo doméstico no remunerado y a la hora de erradicar el aumento de la violencia doméstica, y de la violencia de género en general, que son impedimentos para la participación política, social y económica de las mujeres.
Los jóvenes
Capacitar a los jóvenes significa invertir en ellos y ellas, creando un entorno en el cual puedan desarrollar su potencial. Que haya jóvenes capacitados y educados es fundamental para el futuro de sus comunidades, y para el mundo entero. Creemos que con una acción coordinada entre los socios africanos y europeos, las jóvenes y los jóvenes africanos pueden marcar la diferencia a la hora de afrontar los desafíos globales, regionales y locales. Estamos convencidos y convencidas de que crear oportunidades para los jóvenes africanos es crucial dado que tienen un enorme potencial a la hora de configurar sus sociedades, fomentar la democracia y el Estado de derecho, en la promoción de los derechos humanos y las libertades fundamentales, así como de cara a encontrar soluciones innovadoras a los problemas a los que se enfrentan. Pedimos una educación gratuita de alta calidad, la inversión en cualificaciones y que se mejoren las oportunidades laborales.
La lentitud en el despliegue de las vacunas de la COVID-19 está dificultando la perspectiva de una rápida recuperación post-pandémica y genera retrocesos en los avances realizados en materia de inversión en los jóvenes, con la creación de entornos en los cuales puedan desarrollar todo su potencial. Las inversiones en sectores en los que predomina la participación de los jóvenes, como las empresas de nueva creación y las empresas tecnológicas, se han visto enormemente afectadas por la COVID-19. Nos hemos comprometido a acabar con la desigualdad en relación con las vacunas, como parte de una base sólida para reinvertir en los jóvenes y permitirles contribuir de forma significativa a la transformación socioeconómica de nuestras sociedades.
Junto a nuestros socios africanos y europeos, seguiremos promoviendo la inversión en los jóvenes y las jóvenes africanas con el objetivo de hacer frente a los retos globales, regionales y locales. Abogamos por una educación universal y gratuita de alta calidad, por el desarrollo de competencias y por la creación de oportunidades dignas de empleo.
La educación
La educación es vital para crear un futuro mejor y estamos trabajando junto a las Naciones Unidas, otras instituciones de la Unión Europea y organizaciones de la sociedad civil a nivel europeo y mundial de cara a crear el apoyo político y un respaldo financiero sólido para los proyectos internacionales en esta área.
El Grupo S&D vuelve a comprometerse con la idea de que la educación sea un trampolín para la movilidad social y a fin de que puedan independizarse. Parte de su importancia radica también en el papel que la educación desempeña en la formación de líderes/as capaces de contribuir a las soluciones que se requieren en un mundo que cambia constantemente. Por lo tanto, incidimos en que debe acelerarse la campaña mundial de la vacunación contra la COVID-19 para poder hacer frente a los desafíos que se presentan en la prestación de la educación a distintos niveles. Todo ello es especialmente pertinente si se tienen en cuenta los desafíos que presentan la educación en casa y las clases virtuales en el hemisferio sur, donde a veces existen problemas importantes de conectividad.
También seguimos comprometidos con la puesta en marcha de la #EducaInitiative, un programa centrado en el apoyo a la educación apropiada de las jóvenes generaciones que se quedan sin escolarizar como consecuencia de los conflictos y las crisis humanitarias.
Los Objetivos de Desarrollo Sostenible y la erradicación de la pobreza
Después de la COVID-19, nuestra determinación de erradicar la pobreza en el hemisferio sur es ahora más urgente que nunca. La pandemia ha llevado a cientos de millones de personas de grupos y clases vulnerables de la sociedad a caer en la pobreza y el planeta ha sido testigo de la pérdida masiva de puestos de trabajo, de la alteración de las fuentes de sustento y de la distorsión de las cadenas de suministro internacionales. Es fundamental una estrategia contra la COVID-19 que se apoye en un programa de vacunación que sea eficaz. Por lo tanto, reafirmamos nuestro llamamiento para eliminar las barreras de acceso a las vacunas en el hemisferio sur, donde la pobreza sigue causando estragos y se ve agravada por los confinamientos cíclicos.
Seguimos comprometidos con el cumplimiento de los ambiciosos Objetivos de Desarrollo Sostenible establecidos en la Cumbre de la ONU de 2015. El Grupo también apoya la rápida actualización del acuerdo de Zona de Libre Comercio que se firmó en 2018 para acelerar el desarrollo e impulsar el comercio en África. Nos comprometemos a apoyar el desarrollo de una estrategia para su pronta aplicación, incluyendo la creación de instituciones eficaces que permitan alcanzarlos plenamente.
Los eurodiputados y las eurodiputadas del Grupo S&D se comprometen a actuar a fin de promover economías en crecimiento que sean inclusivas y compartidas, y que sean proporcionales a las necesidades del crecimiento previsto de la población. Más concretamente, un enfoque económico holístico, que permita facilitar educación y sanidad universales. Este programa de acción deliberado debe incluir también el suministro de agua potable y el saneamiento, al tiempo que se busca acabar con la pobreza energética. Cualquier plan debe situar también en su centro de aplicación la participación de las mujeres y los jóvenes.
El medio ambiente
Los mensajes de los manifestantes en la COP26 (Conferencia de las Partes) y de los delegados del hemisferio sur reflejaron un desasosiego y una creciente impaciencia ante la falta de acción desde la firma del Acuerdo de París de 2015. Se sigue hablando de reducir el aumento de la temperatura a menos de 1,5 grados y, sin embargo, los planes de los países llevan acumulativamente un calentamiento global por encima de los 2,5 grados, lo cual provocará un estrés térmico extremo, especialmente en el hemisferio sur, y llevará a la extinción de varias especies de plantas. Por lo tanto, compartimos la frustración de aquellos países del hemisferio sur que son los más afectados por el cambio climático y seguimos comprometidos a trabajar con nuestros socios con la finalidad de crear capacidad de resiliencia, adaptación y mitigación en los países africanos. Instamos a los países del hemisferio norte a que cumplan sus compromisos y revisen sus estrategias nacionales para reducir aún más sus contribuciones determinadas a nivel nacional (CDN).
Varios de los retos relacionados con el cambio climático siguen afectando a África de manera significativa, ya sea el aumento exponencial de los desastres naturales o el hecho de que el continente tenga ahora patrones de lluvia erráticos que influyen en las economías y las actividades agrícolas. El cambio climático ha traído consigo un reto perenne de inseguridad alimentaria, así como problemas energéticos para las industrias que dependen en exceso de la hidroelectricidad.
El Grupo S&D se compromete a mejorar la resiliencia de las poblaciones locales y a ayudarlas a prevenir y reducir los riesgos de catástrofe, así como a garantizar la asignación de recursos adecuados. En la misma línea, deseamos que África desarrolle su potencial y se convierta en un líder mundial en la producción y el uso de energías renovables y eficientes que respeten las normas medioambientales.
También seguimos defendiendo el Pacto Verde, que se sitúa en el centro de nuestro programa de asuntos de emergencia climática y que asimismo reconoce la necesidad de trabajar con nuestros socios hacia esa transición verde y de crear empleos verdes que sean dignos.
Los eurodiputados y las eurodiputadas del Grupo S&D desempeñan un papel destacado en el Parlamento Europeo apoyando a los pueblos de África, atendiendo las necesidades humanitarias y de desarrollo, y promoviendo los valores de la democracia y la buena gobernanza. A principios del nuevo milenio, la Unión Europea lanzó un nuevo diálogo con África que pretendía construir una asociación estratégica con el continente. En los últimos años, la Unión Europea también ha respondido activamente a la Primavera Árabe en el norte de África y a los graves problemas de las regiones del Sahel y el cuerno de África. Las acciones destinadas a hacer frente a la inestabilidad en estas regiones deben formar parte de una estrategia más amplia que incluya la buena gobernanza, el desarrollo, la acción humanitaria y, sobre todo, el restablecimiento del Estado de derecho.
Más recientemente, hemos visto una tendencia en relación con el uso de las restricciones por la COVID-19 para restringir los derechos de los ciudadanos y las ciudadanas, incluyendo la libertad de reunión y la libertad de movimiento, dado que la aplicación de estas normas se realiza a menudo de forma selectiva. En algunos casos, se ha llegado a una prohibición general de cualquier actividad política e incluso al aplazamiento indefinido de elecciones debidas. El Grupo S&D sigue comprometido a trabajar con nuestros socios a fin de promover los valores de la democracia y el buen gobierno.
Con respecto a la buena gobernanza, seguimos pidiendo que se construyan instituciones resistentes y accesibles, que sean capaces de ofrecer bienes públicos a los ciudadanos y las ciudadanas. Nuestro concepto de diálogo intergeneracional pretende ofrecer opciones modernas de gobernanza que tengan en cuenta la experiencia de los mayores y las capacidades de los jóvenes en la era digital.
El Grupo seguirá luchando por la promoción de elecciones democráticas y por la formulación de políticas inclusivas, con un papel central de las mujeres y los jóvenes.
El comercio justo
El comercio puede apoyar nuestros objetivos humanitarios y de desarrollo. Creemos que puede, y debe, crear crecimiento económico a fin de reducir la pobreza, ayudar a luchar contra la discriminación y mejorar la situación de las mujeres y los niños/as, reforzar el respeto al medio ambiente y a las normas sociales y de seguridad, reforzar el Estado de derecho, las normas laborales y los derechos humanos, implicar a los sindicatos y a la sociedad civil, e impulsar la integración regional.
Tomamos nota de la importante alteración del comercio intercontinental que ha causado la pandemia de la COVID-19 y abogamos por que una cooperación justa en materia de vacunas se integre en cualquier estrategia de comercio justo. Volvemos a comprometernos con el uso de la Zona de Libre Comercio Continental de África como una oportunidad para reforzar las posiciones comerciales de cada país de África y permitir la responsabilidad mutua en la asociación con Europa y el mundo.
Estamos plenamente comprometidas y comprometidos con el fortalecimiento del comercio intercontinental y prevemos la ampliación del AAE (Acuerdo de Asociación Económica) entre nuestros dos continentes de forma que sea mutuamente beneficiosa, lo cual incluye el intercambio mutuo de innovación, la denominación de origen –incluidos los productos agrícolas–, la gestión justa de los aranceles y la lucha contra la competencia desleal.
Los minerales procedentes de zonas de conflicto
Los eurodiputados y las eurodiputadas del Grupo S&D siguen liderando la batalla por la trazabilidad de las materias primas que se emplean para fabricar muchos productos cotidianos, que a veces proceden de zonas de conflicto, lo cual alimenta los conflictos armados, el trabajo esclavo y los abusos de los derechos humanos. Hay que cambiarlo y queremos que la minería se convierta en una fuente de desarrollo económico que traiga beneficios para las comunidades locales, en lugar de ser una actividad peligrosa por la que se expulsa a la gente de sus tierras, que atrae a niños inocentes a los conflictos armados y que socava el desarrollo en su conjunto.
Tras una larga campaña de los eurodiputados y las eurodiputadas del Grupo S&D, el Parlamento Europeo llegó a un acuerdo con el Consejo de la Unión Europea, el 15 de junio de 2016, sobre un nuevo Reglamento. A pesar de la fuerte oposición de los conservadores, los Socialistas y Demócratas consiguieron un plan jurídicamente vinculante para garantizar la trazabilidad. El objetivo del Grupo S&D es asegurarse de que la regulación sobre la utilización de minerales procedentes de zonas de conflicto no sea un añadido opcional, sino que sea obligatoria.
Ello ha supuesto un duro golpe para las milicias criminales que, en muchas regiones del mundo –especialmente en el este de la República Democrática del Congo (RDC)– masacran, abusan y violan a mujeres y niñas para explotar la minería del estaño, el tungsteno, el tantalio y el oro. Los ciudadanos y las ciudadanas europeos deben poder confiar en que su tableta, su teléfono móvil o su ordenador no están fabricados con minerales manchados de sangre inocente. Estamos luchando para acabar con el comercio de minerales procedentes de zonas de conflicto.
Africa is a top priority for the S&Ds. This is why our MEPs have been on a series of fact-finding missions over recent years to meet with locals, experts and politicians on the ground.
Our MEPs have visited many different countries and regions, including Sierra Leone (February 2017), Kenya (February & December 2016), Ghana (December 2016), Gambia (September 2016), DRC (September 2016), Gabon (August 2016), Mali (July & September 2016), Namibia (June 2016), Ethiopia (April 2016), Botswana (April 2016) Uganda (February 2016) and Tanzania (October 2015). Aside from these S&D visits, our MEPs have also taken part in numerous European Parliament missions to act as international observers, helping to ensure elections are free and fair.
A key visit for us was in April 2015, when a delegation of S&D MEPs, led by President Gianni Pittella, visited the Democratic Republic of Congo (DRC) to meet with the government and officials, the Sakharov Prize Laureate Dr Mukwege and civil-society and business representatives working on human rights, democracy and the fight against conflict minerals. The S&D Group has made violence against women and the banning of conflict minerals a top priority of its political action in the European Parliament. The aim of the mission was to better understand the reality on the ground and how the European Union can help local communities overcome 20 years of civil war.
In May 2017, S&D president Gianni Pittella led an S&D delegation to Nigeria and Guinea to get an overview of the political, security, social and economic situation in both countries – especially to better understand the causes of irregular migration and the solutions to stem the flow of young people leaving Africa illegally. The mission also fed into the S&D Group’s long-term strategy for Africa, addressing the biggest challenges facing both Africa and Europe: migration; the threat of terrorism and radicalisation; climate change; infectious diseases (post-Ebola) and epidemics; managing Africa's demographic boom; the need to consolidate democracy and build effective institutions; and making the best use of the continent's natural resources. The delegation held meetings with parliamentarians, governments, universities, non-governmental organisations and stakeholders, and also visited the Malkohi official and unofficial refugee camps in Yola, in north-east Nigeria, which hosts thousands of internally displaced people fleeing Boko Haram and famine.