Hacen falta urgentemente pruebas de emisiones en condiciones reales de conducción (RDE, por sus siglas en inglés) en la Unión Europea. Por eso, el Grupo S&D del Parlamento Europeo quiere disponer, lo antes posible, de un sistema nuevo que funcione sin problemas. Sin embargo, el nuevo sistema debe basarse en la legislación actual que ya ha aprobado el Parlamento Europeo. Por lo tanto, los Socialistas y Demócratas rechazan la propuesta actual de la Comisión Europea para aumentar los límites aceptados de óxidos de nitrógeno (NOx) como parte del nuevo paquete para introducir un procedimiento de pruebas RDE.

Antes del debate en plenario sobre el tema, la vicepresidenta de Sostenibilidad del Grupo S&D, la eurodiputada Kathleen Van Brempt, dijo:

“El reciente escándalo de los dispositivos manipulados que se han utilizado en vehículos diesel ha revelado no solo el cumplimiento inadecuado y fallido de la regulación de emisiones en el sector automovilístico –las autoridades estadounidenses fueron las que descubrieron el fraude–, sino también que vehículos “perfectamente legales” están emitiendo mucho más de los límites de emisión que se acordaron en el 2007. 

“Para evitar que haya más escándalos, nos hace falta una nueva autoridad de homologación a nivel de la Unión Europea y un sistema de aprobación de homologaciones que sea eficiente. La respuesta al segundo problema que ha sacado a la luz el “Dieselgate” es un test RDE sin lagunas jurídicas para que los nuevos vehículos cumplan los valores límite de emisiones en condiciones reales de conducción. 

“La propuesta de la Comisión Europea, aprobada por los Estados miembros en el Comité Técnico sobre Vehículos de Motor, el pasado mes de octubre, es un avance positivo porque introduce una prueba RDE; pero lamentablemente crea una nueva laguna jurídica en la forma de “factores de conformidad” *”.

El eurodiputado del Grupo S&D y portavoz de Clima y Salud Pública, Matthias Groote, dijo:

“El factor de conformidad de la segunda etapa permite “un margen de desviación” muy por encima de las incertidumbres técnicas y estadísticas del procedimiento de medición. La Comisión Europea y el Consejo están intentando realizar un cambio permanente y sustancial en los valores límite de emisión por la puerta de atrás, aunque los mismos estén consagrados en la regulación básica de la Unión Europea acordada por el Parlamento Europeo y el Consejo. En este sentido, esa decisión sobre el RDE supera claramente las capacidades de implementación ofrecidas en la última norma básica, lo cual también ha sido reconocido por los servicios jurídicos del Parlamento Europeo.

“Apoyamos que se posponga la votación a febrero para dar a la Comisión Europea una última posibilidad de revisar el factor final de conformidad a la baja de forma que solo refleje incertidumbres de medición. Antes del debate en plenario, que tendrá lugar esta noche, reiteramos nuestra petición de disponer de pruebas de emisiones que reflejen las condiciones reales de conducción y nos oponemos ciertamente a cualquier aumento de los límites de óxidos de nitrógeno, que se fijaron hace casi una década.

“Hemos ganado algo de tiempo. Ahora depende de la Comisión Europea acercarse al Parlamento Europeo y evitar nuestro veto”.

*Un “factor de conformidad” es un multiplicador por el cual se permite exceder los límites inicialmente acordados de Euro 6.

Eurodiputados que participan
Jefa de delegación
Miembro
Bélgica