Hoy, los eurodiputados y eurodiputadas de la comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria y de la comisión de Mercado Interior y Protección del Consumidor del Parlamento Europeo han adoptado una posición sobre la Directiva sobre declaraciones ecológicas, que establece normas que exigen a las empresas fundamentar las afirmaciones ecológicas voluntarias que realizan.
Los consumidores y consumidoras se encuentran con innumerables declaraciones ecológicas como “respetuoso con el medio ambiente”, “ecológico”, “ambientalmente correcto”, pero muchas de ellas no son fiables. Las encuestas han revelado que, en muchos casos, estas afirmaciones son vagas, engañosas, infundadas, o no están corroboradas. Desde jabones a cremas solares, esta Directiva se aplicará a afirmaciones medioambientales explícitas realizadas por comerciantes sobre productos introducidos en el mercado o puestos en servicio, también a través de los mercados en línea, o a los sistemas de etiquetado medioambiental en el marco de prácticas comerciales entre empresas y consumidores.
Para el Grupo S&D, el objetivo de la Directiva está muy claro: luchar contra el lavado verde en interés del medio ambiente y de la protección de los consumidores. En las negociaciones entre los grupos políticos, los Socialistas y Demócratas han abogado por adoptar medidas firmes, en particular en materia de verificación ex ante, limitaciones a las afirmaciones sobre compensación de emisiones de carbono y sanciones adecuadas.
Cyrus Engerer, coponente del PE y miembro de la comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria del Parlamento Europeo, ha declarado:
“Alrededor del 56% de los consumidores y consumidoras de la UE tienen en cuenta el medio ambiente a la hora de adquirir productos y servicios. La Directiva sobre declaraciones ecológicas debería garantizar que estén bien informados/as y que puedan confiar en la información que reciben al tomar decisiones de compra.
“A fin de contribuir a la transición hacia un medioambiente libre de componentes tóxicos, también hemos luchado por ofrecer a la Comisión la posibilidad de restringir o prohibir el uso de declaraciones ecológicas sobre determinados productos que contienen sustancias perjudiciales para nuestro medio ambiente o nuestra salud”.
Laura Ballarín, ponente alternativa del Grupo S&D y miembro de la comisión de Mercado Interior y Protección del Consumidor del Parlamento Europeo, ha declarado:
“¡Necesitamos proteger a los consumidores del lavado verde! Sabemos que los consumidores prefieren comprar productos que lleven una etiqueta medioambiental que productos sin ella. También sabemos por encuestas recientes que los consumidores creen que las declaraciones y etiquetas ecológicas solo deben autorizarse si están previamente aprobadas o verificadas. El Grupo S&D ha presionado para mantener la verificación ex ante y la certificación realizada por verificadores independientes y acreditados a fin de garantizar que todas las etiquetas que declaren características ‘ecológicas’ o ‘respetuosas con el medio ambiente’ apelando a la conciencia ecológica del consumidor no sean engañosas ni perjudiciales”.
Nota para los redactores/as:
Está previsto que la votación en el pleno tenga lugar en marzo.
