Los clientes vulnerables y en situación de pobreza energética quedarán ahora mejor protegidos frente a los cortes de electricidad. Los Estados miembros estarán obligados a garantizar que estos clientes estén plenamente protegidos contra los cortes del suministro eléctrico mediante la adopción de las medidas adecuadas, como la prohibición de los cortes u acciones equivalentes. El negociador del Grupo S&D ha logrado incluir estas disposiciones en un acuerdo alcanzado anoche entre el Parlamento Europeo, los Estados miembros y la Comisión Europea bajo la Presidencia española del Consejo. Con esta gran victoria, los Socialistas y Demócratas cumplen la promesa que realizaron en el Paquete de Solidaridad Invernal hace un año. El Grupo S&D declaraba que ningún europeo ni europea debería tener que elegir entre comer o calentarse. Este principio ha guiado el trabajo del Grupo S&D sobre la configuración del mercado de la electricidad de la UE desde que la Comisión Europea presentara la propuesta hace nueve meses.
Nicolás González Casares, eurodiputado del Grupo S&D y negociador del Parlamento Europeo sobre la configuración del mercado de la electricidad de la UE en la comisión de Industria, Investigación y Energía, ha declarado:
“Estoy orgulloso de lo que hemos logrado en beneficio de las personas. Los clientes quedarán mejor protegidos frente a la volatilidad de los precios y tendrán derecho a unos contratos a precio fijo. La pasada noche, pusimos fin a la práctica inaceptable de que los proveedores de electricidad sean libres de modificar unilateralmente las condiciones de un contrato. Todos los consumidores, incluidas las microempresas, pequeñas y medianas empresas, tendrán acceso a precios a largo plazo, asequibles y estables.
“Me alegra especialmente que hayamos protegido a nuestros ciudadanos y ciudadanas más vulnerables: nadie debería verse obligado a elegir entre comprar comida o pagar la factura de electricidad para calentar su hogar. Con la nueva configuración del mercado de la electricidad de la UE, protegemos a los consumidores y consumidoras contra las subidas de precios y obligamos a los Estados miembros a adoptar medidas firmes para proteger plenamente a los clientes vulnerables y en situación de pobreza energética de los cortes de electricidad”.
