Los eurodiputados y las eurodiputadas del Grupo S&D que participaron en la Conferencia Ministerial de la OMC (Organización Mundial de Comercio) en Nairobi han recibido con agrado el hecho de que se llegara a un acuerdo, pero han criticado su falta de ambición y alcance.
El eurodiputado del Grupo S&D Bernd Lange, presidente de la comisión de Comercio Internacional del Parlamento Europeo, dijo:
“Estamos satisfechos de que se haya alcanzado alguna clase de acuerdo y de que haya movimientos en relación con la supresión de los subsidios agrícolas. Sin embargo, después de cinco días difíciles de negociaciones, el acuerdo final fue, como poco, ligeramente decepcionante. Habíamos presionado para llegar a un acuerdo que fuera jurídicamente vinculante y, aunque lo conseguimos en ciertas áreas, no puede considerarse un acuerdo completo.
“Desde nuestro punto de vista, lo más positivo es que se ha conseguido llegar a un acuerdo y que todo lo que contiene apoya a los países menos desarrollados. Si esas negociaciones hubieran fracasado totalmente, hubiera sido el clavo del ataúd de las negociaciones comerciales de la ronda de Doha y podría haber cuestionado todo el propósito de la existencia de la OMC. Se ha evitado; pero, si queremos que la OMC funcione en el futuro, debemos reestructurarla para volverla más democrática y responsable”.
La eurodiputada del Grupo S&D, Inmaculada Rodríguez-Piñero Fernández, añadió:
“Queríamos un acuerdo que tuviera en cuenta el peso económico y de desarrollo de los países involucrados. El comercio puede aportar enormes beneficios a los países en desarrollo y eliminar las subvenciones a las exportaciones agrícolas en los países más pobres para que se compita de forma más leal. Sin embargo, debemos dejar de tratar a los países en desarrollo como si fueran un bloque monolítico: China no es Kenia. Los países cuyas economías han crecido rápidamente en los últimos años y décadas deben de dar un paso al frente y desempeñar un papel mayor para acometer los objetivos mundiales de desarrollo”.
