Hoy, los miembros de la comisión parlamentaria de investigación de la Medición de las Emisiones en el Sector del Automóvil (EMIS) han escuchado el testimonio de los ex comisarios Janez Potočnik (Medio Ambiente) y Antonio Tajani (Industria).
En la sesión de casi cuatro horas de duración, quedó claro que la Comisión Europea tuvo más que suficiente información en relación con la posible utilización de dispositivos engañosos por parte de la industria automovilística, pero no analizó más el tema.
El portavoz del Grupo S&D en el escándalo del Dieselgate, el eurodiputado Seb Dance, dijo:
“El comisario Tajani ignoró las crecientes advertencias, incluyendo una carta de su colega, el ex comisario de Medio Ambiente Janez Potočnik, de que las empresas de automóviles podrían estar usando dispositivos engañosos para modificar las pruebas de emisiones. Claramente, no pensó en preguntar por qué los números –la diferencia entre las emisiones registradas en las pruebas de laboratorio y en carretera– no daban y, cómodamente, prefirió creer que el problema no existía.
“Ello plantea el interrogante de que, si Tajani pensaba que el problema se limitaba a las pruebas de laboratorio, ¿por qué no supervisó una demora significativa en la introducción de las pruebas en condiciones reales de conducción para los coches?”
La vicepresidenta del Grupo S&D, la eurodiputada Kathleen Van Brempt, que preside la comisión EMIS, dijo:
“El ex comisario Potočnik estaba en lo cierto en relación con la distribución inadecuada de responsabilidades dentro de la Comisión Europea. No es apropiado que los mismos servicios sean responsables tanto de los resultados económicos del sector en cuestión como de la regulación medioambiental vinculada a esa actividad. Si los servicios medioambientales hubieran sido responsables del desarrollo y la aplicación de la legislación de las emisiones de vehículos –como lo son en la legislación medioambiental de otros sectores–, quizás no se hubiera dado la situación de que no se consiguieran detectar y prohibir los dispositivos engañosos”.
