Después de la publicación de documentos confidenciales sobre las negociaciones del Acuerdo Transatlántico para el Comercio y la Inversión (ATCI), los eurodiputados y las eurodiputadas del Grupo S&D reiteran su petición a favor de un tratado progresista que respete los valores de la Unión Europea y que incluya estándares elevados.
El eurodiputado del Grupo S&D y portavoz de política comercial, David Martin, afirmó:
“Estos documentos que se han filtrado confirman lo que sabemos desde hace mucho: que Estados Unidos defenderá firmemente sus intereses en las negociaciones del ATCI.
“El Grupo S&D pide que la Unión Europea sea igualmente firme defendiendo nuestros propios valores, incluyendo salvaguardar el principio de precaución de la Unión Europea que garantiza altos niveles de protección para nuestros ciudadanos. No aceptaremos un ATCI que signifique una reducción de los estándares.
“Sin embargo, debe dejarse claro que estos documentos se refieren a las posiciones negociadoras de ambas partes. No hay nada en esa filtración que indique que la Unión Europea haya cumplido alguna de las peticiones de los Estados Unidos. En esta etapa de la negociación, los documentos muestran mucha pose y tácticas, pero poca información concreta sobre qué aspecto tendría un posible ATCI.
“Los requisitos del Grupo S&D sobre un ATCI progresista se han detallado claramente en varias ocasiones. Pedimos un acuerdo que pueda contribuir a crear empleo y crecimiento en Europa, al tiempo que protege nuestros valores y fija estándares elevados para los derechos de los trabajadores y la protección del medioambiente”.
El eurodiputado del Grupo S&D y presidente de la comisión de Comercio Internacional, Bernd Lange, añadió:
“La posición del Parlamento Europeo sobre el ATCI se detalló claramente en su Resolución del 8 de julio del 2015. Solo un acuerdo que respete las peticiones de los representantes elegidos por los ciudadanos europeos tendrán opción de ser aprobado por esta Cámara. El Parlamento Europeo no aceptará compromisos viciados que pueda llevar a la reducción de los estándares europeos; y esto no es negociable.
“No aceptaremos un mal acuerdo solo porque podamos conseguir uno rápidamente; al contrario. Le hemos dejado suficientemente claro a la Comisión Europea y a sus homólogos estadounidenses que valoramos el contenido frente a la premura”.
