Hablando hoy en un seminario organizado por el Grupo S&D del Parlamento Europeo sobre los principios rectores de las Naciones Unidas, los Planes de Acción Nacional y las mejores prácticas de las corporaciones, Elena Valenciano, eurodiputada del Grupo S&D y presidenta de la subcomisión de Derechos Humanos, dijo:
 
“Para el Grupo S&D y para el Paramento Europeo, la relación entre las empresas y el respeto de los derechos humanos es de vital importancia, y todas las corporaciones deben considerar esta relación seriamente.
 
“El respeto de los derechos humanos en las empresas debe ser un prerrequisito para que la Unión Europea apoye al sector privado, así como la obligación de las empresas de informar, acuerdos del sector privado entre empresas y ONGs, y la inclusión de cláusulas de Responsabilidad Social de las Empresas (RSE) y de evaluaciones de impacto en las negociaciones comerciales y de inversión”.

El eurodiputado del Grupo S&D y coordinador de la subcomisión de Derechos Humanos (DROI), Antonio Panzeri, que presidió los debates sobre cómo las personas afectadas pueden beneficiarse de un instrumento de obligado cumplimiento, añadió:
 
“Los Estados deben adoptar las medidas que hagan falta, en línea con sus obligaciones de derechos humanos, para garantizar que las personas afectadas por abusos de los derechos humanos relacionados con las empresas pueden acceder a una reparación efectiva: ya sea judicial o por medios no judiciales que sean apropiados.
 
“Además, los Estados deben adoptar las medidas necesarias para proteger contra abusos de los derechos humanos que estén relacionados con las empresas, mediante legislación, medidas políticas y regulación, así como con mecanismos de responsabilidad. Parece lógico que una empresa que haya causado, o haya contribuido a causar, un efecto adverso sobre los derechos humanos debe cooperar para remediarlo mediante procesos que sean legítimos”.

El eurodiputado Richard Howitt, ponente desde hace mucho sobre responsabilidad social corporativa del Parlamento Europeo y coordinador de Asuntos Exteriores del Grupo  S&D, afirmó:
 
“Los países europeos no deben descuidar la obligación del Estado de proteger los derechos humanos en los principios rectores de las Naciones Unidas, y deben construir sobre los nuevos requisitos que el Grupo S&D ha defendido en relación con la información de carácter no financiero, presentando otras medidas para garantizar la responsabilidad jurídica de las corporaciones transnacionales, cuando se violen los derechos humanos.

“Nuestro Grupo apoya las preocupaciones europeas de que no debe desaprovecharse la ocasión de implementar los principios rectores y de que todas las empresas, no solo las transnacionales, deben respetar los derechos humanos; sin embargo, apoyamos con firmeza que la Unión Europea se involucre plenamente en el Grupo de Trabajo de las Naciones Unidas sobre un instrumento de obligado cumplimiento”.

“Los principios rectores de las Naciones Unidas son la base y no el umbral; sin embargo, hasta el momento, son el único instrumento internacional y todos los Estados miembros de la Unión Europea deben concluir planes de acción con los que la Unión Europea en su conjunto se comprometa”.