Bajo el liderazgo de los Socialistas y Demócratas, se espera que el Parlamento Europeo respalde hoy la creación de una sólida fuerza de respuesta rápida denominada Capacidad de Despliegue Rápido de la UE, que constará de un mínimo de 5.000 efectivos. Esto se ajusta plenamente a la propuesta del Alto Representante, Josep Borrell, recogida en la Brújula Estratégica.

El objetivo es que la UE pueda reaccionar con rapidez y eficacia a los conflictos y crisis que se producen fuera de sus fronteras. Entre los cometidos de la Capacidad de Despliegue Rápido estarán las operaciones de rescate y evacuación, la entrada inicial y la fase inicial de las operaciones de estabilización y el refuerzo temporal de otras misiones. Asimismo, también podría utilizarse como fuerza de reserva para asegurar una vía de salida cuando sea necesario.

En el informe elaborado por el eurodiputado del S&D y ponente del Parlamento Europeo sobre este dosier, Javi López, los eurodiputados y eurodiputadas recalcan que para que esta capacidad de despliegue rápido sea eficaz, debería disponer de un cuartel general de operaciones permanente con una financiación, un personal y una infraestructura adecuados. Además, para facilitar la toma de decisiones en cuanto a la utilización de la nueva fuerza, los eurodiputados/as animan a los Estados miembros a recurrir a la posibilidad de la “abstención constructiva” cuando no pueda alcanzarse la unanimidad, a lo que le seguiría una votación por mayoría cualificada sobre las decisiones operativas y de otro tipo.

Javi López, eurodiputado del Grupo S&D y ponente del Parlamento Europeo sobre la Capacidad de Despliegue Rápido de la UE, ha declarado:

“La retirada de Afganistán, la brutal invasión de Ucrania y el deterioro de la situación de seguridad en la vecindad de Europa han puesto de manifiesto la necesidad de que la UE fortalezca sus capacidades de defensa. Dado que el proyecto del grupo de combate de la UE nunca ha llegado a funcionar, ahora debemos dotar a nuestra Unión de las capacidades y las estructuras necesarias para actuar con eficacia para proteger los intereses, los principios y los valores de la ciudadanía de la Unión Europea en todo el mundo, cuando sea necesario.

Nuestro objetivo es contar con una capacidad de al menos 5.000 efectivos listos para ser desplegados en un plazo de 5 a 10 días en tiempos de crisis, para que lleven a cabo labores de rescate y evacuación, operaciones de entrada inicial y estabilización, o sirvan de refuerzo temporal de otras misiones.

La creación y la ejecución de la Capacidad de Despliegue Rápido no solo nos permitirá ser un aliado más fuerte dentro de nuestro marco de cooperación UE-OTAN, sino que también supondrá un paso importante hacia la consecución de nuestra autonomía estratégica y para convertirnos en un actor geopolítico real y creíble en un mundo cada vez más competitivo”.

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