En un debate parlamentario europeo sobre el deterioro democrático de Hungría, los eurodiputados y las eurodiputadas del Grupo S&D han criticado a la Comisión Europea y al Consejo de la Unión por su inacción contra el gobierno de Viktor Orbán.

Los eurodiputados y las eurodiputadas del Grupo S&D apoyarán en su totalidad la votación de mañana sobre un informe que enumera el empeoramiento del historial del gobierno de Orbán en relación con el Estado de derecho. Entre los temas que se analizan figuran: la falta de independencia judicial en Hungría; el uso por parte del gobierno de campañas electorales “omnipresentes” que llevaron a unas elecciones injustas a principios de este año; un campo de juego injusto para los medios de comunicación, como resultado de que los medios progubernamentales reciban la mayor parte de la financiación estatal; la discriminación de las comunidades vulnerables, como las personas LGBTQI; y, más recientemente, el inaceptable discurso racista del primer ministro acerca de no querer convertirse en “personas de raza mixta”.

Los Socialistas y Demócratas instan a la Comisión Europea y al Consejo de la Unión a utilizar todos los instrumentos y herramientas que tengan a su disposición para defender los valores democráticos de la Unión Europea y defender los derechos de los ciudadanos y las ciudadanas húngaros que necesitan nuestro apoyo.

La eurodiputada Bettina Vollath, negociadora del Grupo S&D en el informe sobre la violación de los valores de la Unión Europea por parte de Hungría:

“En la desaparición democrática de Hungría, Viktor Orbán es culpable de muchos cargos. Sin embargo, una y otra vez, a pesar de la reincidencia, no hay consecuencias por parte de la Unión Europea. Como el líder más antiguo de la Unión Europea, parece ser intocable en el Consejo y la Comisión Europea.

“Orbán incumple reiteradamente la legislación de la Unión Europea y desprecia los valores de la Unión, pero el Consejo no avanza en el procedimiento del artículo 7 ni presenta recomendaciones concretas que puedan ayudar a impedir que el Estado de derecho se deteriore aún más. El gobierno de Fidesz tiene un historial atroz de corrupción y mal uso de los fondos de la Unión Europea, y sin embargo hay rumores de que la Comisión Europea se dispone a aprobar un Plan de Recuperación de la COVID húngara que llenaría los bolsillos de Orbán Inc.

“Si las demás instituciones quieren apaciguar a Viktor Orbán deben reconocer que se trata de una bofetada a los valores de la Unión Europea y admitir que son cómplices de socavar la democracia”.