El presidente del Grupo S&D del Parlamento Europeo, Gianni Pittella, y el presidente del PSE (Partido Socialista Europeo), Sergei Stanishev, les han pedido a las autoridades de Moldavia y a todas las fuerzas políticas que muestren su responsabilidad con el país reduciendo las tensiones y garantizando la estabilidad. Sería la primera precondición para afrontar con éxito los retos que afronta el país y respetar las expectativas de los ciudadanos de que haya instituciones imparciales y funcionales. Moldavia puede avanzar y seguir por el camino europeo llevando a cabo las reformas que hacen falta.

Las luchas y la inestabilidad política han gastado demasiado tiempo y han obstaculizado la implementación de reformas importantes en los últimos años. El impasse político en el país entorpece la implementación efectiva del Acuerdo de Asociación y de que se aprovechen plenamente las oportunidades que ofrece.

El futuro de Moldavia está en riesgo y solo instituciones estables y que estén comprometidas con el modelo europeo pueden garantizarlo. Los que desafían el orden constitucional ponen en peligro todo el proceso.

Sergei Stanishev, presidente del Partido de los Socialistas Europeos, dijo:

“Nos preocupan las peticiones de violencia contra representantes legítimos del pueblo moldavo. Creemos que las actuales cuestiones políticas solo pueden resolverse mediante un diálogo intenso y respetando el imperio de la ley”.

Gianni Pittella y Sergei Stanishev mantuvieron una reunión, en Estrasburgo, con miembros de la actual coalición de gobierno: Marian Lupu, líder del Partido Democrático de Moldavia, y Mihai Ghimpu, del Partido Liberal de Moldavia. Durante las reuniones, los líderes moldavos expresaron su voluntad de implementar las reformas que hacen falta para responder a las expectativas del pueblo moldavo.

El presidente del Grupo S&D, Gianni Pittella, destacó:

“Queremos ver cómo Moldavia avanza y se moderniza. El país ha firmado la generación más avanzada de Acuerdo de Asociación con la Unión Europea. Moldavia tiene, por lo tanto, una oportunidad única de realizar avances concretos en sus aspiraciones europeas. Les pedimos a las nuevas autoridades que se han establecido recientemente en Chisinau que vuelvan al trabajo y adopten e implementen reformas que hacen muchísima falta en beneficio de todos los ciudadanos moldavos, y que luchen contra la corrupción. Hemos recibido garantías en ese sentido. Estamos pidiendo responsabilidad a todos los actores políticos en el país y animamos firmemente al diálogo político, condenando cualquier acción extremista o violenta”.

La familia socialdemócrata europea condena firmemente cualquier acto de violencia política que no solo supone una amenaza a la atmósfera pacífica que hace falta para el progreso, sino también a la seguridad regional.