Los eurodiputados y las eurodiputadas del Grupo S&D han rechazado hoy una propuesta conservadora que aspira a transponer la austeridad ciega y normas fiscales estrictas –el llamado Pacto Presupuestario– a los tratados de la Unión Europea, durante una votación en la comisión de Asuntos Económicos y Monetarios. Los eurodiputados y las eurodiputadas del Grupo S&D han rechazado los falsos argumentos del Partido Popular Europeo (PPE) sobre el método comunitario y han pedido una revisión de las normas del Pacto Presupuestario a favor de convergencia socioeconómica ascendente.

El Pacto Presupuestario impone una disciplina fiscal más estricta a los Estados miembros de la zona euro, según la cual los presupuestos nacionales deben estar en equilibrio o superávit. Si los gobiernos se desvían de los objetivos presupuestarios fijados, se activarían sanciones automáticas.

El negociador del Grupo S&D para informe sobre el pacto presupuestario, el eurodiputado Hugues Bayet, afirmó:

“Una vez más, el PPE y sus amigos han mostrado su verdadera cara. Apoyan la austeridad ciega –ahora igual que en el pasado– frente a toda evidencia económica y a pesar de las declaraciones públicas sobre el verdadero compromiso con la responsabilidad democrática.

“Nosotros, los eurodiputados y las eurodiputadas del Grupo S&D, creemos firmemente que cualquier introducción del pacto presupuestario en la legislación de la Unión Europea debe verse precedida de una revisión de sus normas, a favor de la convergencia socioeconómica ascendente. Esa revisión no ha tenido lugar y por eso hemos rechazado la propuesta. No podemos aceptar ningún automatismo cuando la vida de los ciudadanos y las ciudadanas europeas está en riesgo.

“Ya es hora de que Europa pase la página de la austeridad ciega. Más austeridad y normas fiscales más estrictas –como proponen el PPE y ALDE (Grupo de la Alianza de los Liberales y Demócratas por Europa) – son una receta para el colapso financiero y la privación humana. Lo hemos visto antes. Como la historia nos ha mostrado, más austeridad no llevará a crecimiento económico; pero, sin duda, avivará el populismo y azotará a los más pobres y los más vulnerables”.

La portavoz de Asuntos Económicos y Monetarios del Grupo S&D, Pervenche Berès, afirmó:

“La acusaciones del PPE de que al votar en contra de este informe estamos votando en contra del método comunitario y de que haya más responsabilidad democrática no son solamente falsas, sino también cínicas. Es precisamente el método comunitario lo que estamos defendiendo, insistiendo en una evaluación y en la revisión de las normas, como prevé el Tratado de Estabilidad, Coordinación y Gobernanza (TECG), antes de introducirlas en la legislación de la Unión Europea, y no al contrario.

“Nosotros, los Socialistas y Demócratas, hemos estado luchando durante años por estrategias económicas más inteligentes, favorables a la inversión y que se basen en buenas decisiones democráticas. Por lo tanto, también hemos reiterado desde hace mucho nuestra petición de poner fin a la austeridad ciega y de reformar la UEM (Unión Económica y Monetaria). Solo con una reforma ambiciosa de la UEM, puede la Eurozona ser más resiliente a las nuevas crisis y lograr los objetivos de sostenibilidad. ¡La responsabilidad fiscal debe ir de la mano de la solidaridad!” 

Nota para los redactores

El Tratado de Estabilidad, Coordinación y Gobernanza (TECG), al que se conoce comúnmente como el Pacto Presupuestario, fue firmado en marzo de 2012, en el contexto de la crisis financiera, por los 25 Estados miembros de la Unión Europea, y entró en vigor el 1 de enero de 2013. Tal y como está, aspira a reforzar el pilar económico de la Unión Monetaria Europea introduciendo una disciplina fiscal más estricta.