Los Socialistas y Demócratas han celebrado el acuerdo que alcanzaron ayer el Parlamento Europeo y el Consejo de la Unión Europea sobre un nuevo Reglamento de Gobernanza de la Unión Energética.
En ausencia de objetivos nacionales de eficiencia energética y renovables de obligado cumplimiento, ahora se les exigirá a los Estados miembros que desarrollen Planes Nacionales Integrados de Energía y Clima (NECPs, por sus siglas en inglés) de diez años, dirigidos a cumplir los objetivos energéticos y del clima del 2030 de la Unión Europea.
La eurodiputada Theresa Griffin, negociadora del Grupo S&D en la comisión de Industria y Energía, afirmó:
“La credibilidad de la Unión Europea como líder en la lucha global contra el cambio climático está en riesgo, porque hasta el momento los Estados miembros van retrasados en su contribución a los compromisos sobre las emisiones de gases de efecto invernadero de la Unión Europea que se adoptaron en París. Este Reglamento es esencial para garantizar una transición justa a una economía de bajo carbono, junto a las Directivas de Eficiencia Energética y Renovables, en las cuales los eurodiputados y las eurodiputadas del Grupo S&D han jugado un papel destacado.
“Lo que es más importante, nuestro Grupo ha presionado con éxito por medidas específicas para abordar la pobreza energética. El nuevo Reglamento incluye una obligación de que los Estados miembros informen sobre quienes no puedan pagar su factura energética y recoge la necesidad de establecer un objetivo para reducir la pobreza energética en el plan nacional, si se detectaran niveles significativos de pobreza energética.
“También se ha conseguido que se informe sobre la Transición Justa con objeto de ayudar a las comunidades vulnerables y a la transición de los trabajadores a la economía de bajo carbono. De hecho, el acuerdo de París requiere que los planes energéticos nacionales incluyan medidas que garanticen un trabajo digno, la inclusión social y la lucha contra la pobreza”.
El eurodiputado Carlos Zorrinho, negociador del Grupo S&D en la comisión de Medio Ambiente, afirmó:
“Este Reglamento es un pilar importante para implementar una política energética europea de descarbonización que tenga un enfoque firme en las renovables, la eficiencia energética y las interconexiones. Pide una mayor movilización de la sociedad civil, estableciendo un diálogo entre múltiples partes interesadas y garantizando un papel destacado de la Unión Europea en la agenda de París.
“Además, el acuerdo que se alcanzó ayer ofrece certidumbre reguladora para los inversores, lo cual animará a las industrias y a los servicios de la Unión Europea a invertir en la transición hacia una economía digitalizada y de bajo carbono. Por primera vez, los Estados miembros tendrán que preparar estrategias a largo plazo que contribuyan al logro de los objetivos de París”.
