Este verano ha supuesto un fuerte recordatorio de que debemos ir más rápido en nuestra ambición para abordar la crisis climática y conseguir un paquete “Fit for 55” que sea progresista. Ese es el mensaje que los Socialistas y Demócratas del Parlamento Europeo quieren transmitir a los líderes europeos, a través de la propuesta de Resolución sobre “Las consecuencias de la sequía, los incendios y otros fenómenos meteorológicos extremos: incrementar los esfuerzos de la Unión Europea para luchar contra el cambio climático”.
El coordinador del Grupo S&D en la comisión de Medio Ambiente, el eurodiputado Tiemo Wölken, dijo:
“Debemos dejar de limitarnos a calcular anualmente los daños, las víctimas y las consecuencias extremas que causa la sequía en Europa, y ser coherentes en todos los compromisos con la finalidad de alcanzar el objetivo de neutralidad climática a más tardar en 2050 y de incrementar las aspiraciones para 2030 en las negociaciones de Fit for 55.
“La actual emergencia por sequía es la peor de los últimos 500 años, según ha informado el Observatorio Europeo de la Sequía, y tiene un impacto negativo y dramático sobre nuestra salud, nuestros bosques, nuestra biodiversidad y nuestra economía.
“No hay atajos sencillos. Los cambios en los patrones de precipitación y el calentamiento del planeta multiplican la probabilidad de sequías, olas de calor y otros fenómenos de temperaturas extremas. La actual crisis energética debe verse como una oportunidad para ir más rápido con el paquete Fit for 55 a fin de conseguir cuanto antes la reducción de, al menos, el 55% de las emisiones de gases de efecto invernadero para 2030 respecto a los datos de 1990, tal y como obliga la Ley Europea del Clima.
“Desde luego, no debemos dar marcha atrás aceptando soluciones contaminantes que sólo empeorarían la situación.
“El camino está trazado. Si queremos acabar con las consecuencias extremas de la sequía, ya es hora de que todos y todas hagamos camino”.
La coordinadora del Grupo S&D en la comisión de Agricultura, la eurodiputada Clara Aguilera, añadió:
“Es probable que la sequía de este verano se repita cada año. La ola de calor ha venido acompañada de un gran número de incendios, especialmente en España, con unas 300.000 hectáreas quemadas. Otra situación preocupante es la tremenda sequía que azota al continente.
“Hay que tener en cuenta que muchos agricultores y agricultoras europeos están teniendo dificultades para cultivar debido a la sequía.
“Si no llueve pronto en las zonas agrícolas, es posible que haya menos producción de alimentos en las próximas temporadas. La sequía, la peor de los últimos 500 años, está devastando masivamente el rendimiento de los cultivos en toda Europa. Ello podría afectar a la seguridad alimentaria de la Unión Europea.
“Tenemos que frenar el abandono de las zonas rurales e invertir en sistemas de riego que sean modernos y eficientes, y en una mejor planificación a fin de poder hacer frente al impacto de la sequía”.
