La aprobación hoy en el Parlamento Europeo del informe “Hacia un mecanismo de ajuste en frontera por emisiones de carbono de la Unión Europea que sea compatible con la OMC” (Organización Mundial de Comercio) le facilita a la Comisión Europea una importante orientación sobre el trabajo de la Unión Europea en relación con nuestro objetivo de que Europa sea neutra en cuanto al clima antes de 2050, como tarde. El mecanismo de ajuste en frontera por emisiones de carbono (CBAM, por sus siglas en inglés) es un mecanismo importante que, en el marco del Pacto Verde Europeo, estimulará a la industria para que invierta en soluciones verdes y evitará la competencia desleal desde fuera de la Unión Europea.

El portavoz del Grupo S&D para el informe, el eurodiputado Mohammed Chahim, afirmó:

“Necesitamos condiciones de igualdad. Si quieres que tus productos entren en el mercado europeo, debes abrazar nuestros estándares climáticos. Es el primer objetivo de este mecanismo de ajuste en frontera por emisiones de carbono: reducir las emisiones globales de CO2.

“Como socialdemócratas pedimos condiciones transparentes y predecibles, de forma que la industria –dentro y fuera de la Unión Europea– pueda ajustarse y prepararse. Por lo tanto, necesitamos una eliminación progresiva y gradual, pero rápida, de las cuotas gratuitas dentro del Régimen de Comercio de Derechos de Emisión (RCDE), una vez que se introduzca el CBAM. Contamos con la Comisión Europea para que aporte calidad en este asunto.

“Trabajaremos duramente el próximo año para aprobar la legislación del clima del paquete “Fit for 55” (objetivo 55%) con objeto de reducir las emisiones en, al menos, un 55% antes de 2030, incluyendo la propuesta legislativa del mecanismo de ajuste en frontera por emisiones de carbono. El mensaje está claro: queremos que la Comisión Europea presente una propuesta ambiciosa que sitúe a la Unión Europea en el lado correcto de la historia cuando se trata de luchar contra el cambio climático”.

La coordinadora del Grupo S&D en la comisión de Medio Ambiente, la eurodiputada Jytte Guteland, afirmó:

“La Unión Europea es el mayor importador mundial de carbono, y las importaciones netas de bienes y servicios de la Unión Europea representan más de un quinto de las emisiones domésticas de CO2 de la Unión Europea. Obviamente, ello obstaculiza nuestra lucha contra el cambio climático y debilita medidas importantes para reducir nuestras emisiones de gases de efecto invernadero.

“La introducción de un mecanismo de ajuste en frontera por emisiones de carbono puede ser la ficha que falta del puzzle en los esfuerzos para reducir las emisiones, pero también de cara a garantizar que la responsabilidad de frenar el cambio climático también la comparten otros actores más allá de la Unión Europea.

“Se trata de que Europa muestre liderazgo y haga lo que es correcto.

“Muy lejos de tratarse de una herramienta oculta para fomentar el proteccionismo, las restricciones o una discriminación injustificables, el CBAM puede acabar teniendo un gran valor, tanto para el clima como siendo un fuerte incentivo económico que permita desarrollar métodos de producción con una menor huella de gases de efecto invernadero, y puede estimular las inversiones en innovación y nuevas tecnologías. Esto es lo que la Comisión Europea debe considerar antes de realizar cualquier propuesta legislativa”.

Eurodiputados que participan
Vicepresidente
Los Países Bajos
Contacto(s) de prensa del Grupo S&D