Los eurodiputados y las eurodiputadas del Grupo S&D han condenado las medidas de urgencia que ha adoptado Hungría en respuesta a la crisis de la Covid-19, que permitirán que el primer ministro, Viktor Orbán, gobierne por decreto, sin control parlamentario y durante un periodo indefinido de tiempo.
El Grupo S&D del Parlamento Europeo les pide al Consejo de la Unión Europea y a la Comisión Europea que garanticen que hay consecuencias cuando se incumplan valores esenciales de la Unión Europea, mediante un mecanismo efectivo de la Unión Europea sobre la democracia, el imperio de la ley y los derechos fundamentales, y que los fondos de la Unión Europea se condicionen al respeto del imperio de la ley.
Iratxe García, presidenta del Grupo S&D, afirmó:
“Orbán se ha aprovechado cínicamente de la pandemia para adoptar leyes de emergencia que le permitan gobernar indefinidamente por decreto, como un mero dictador. Al mismo tiempo, afectando también a la libertad de expresión al imponer duras sanciones contra quienes supuestamente difundan desinformación, restringiendo todavía más lo que quedaba de la libertad de prensa en Hungría.
“Son solo unas cuantas de una larga lista de medidas que Orbán ha tomado para desmantelar la democracia en Hungría. Aun así, la Unión Europea no ha hecho nada concreto para sancionarle por sus acciones. Es muy dañino, sacude los cimientos de nuestra Unión y destruye nuestra reputación internacional como faro de la libertad, la democracia y los derechos fundamentales. Les pido a los Estados miembros y a la Comisión Europea que desbloqueen urgentemente las negociaciones sobre la propuesta de condicionalidad de los fondos de la Unión Europea, de forma que puedan finalmente aplicarse algunas sanciones concretas. Los fondos de la Unión Europea no deben ir a los que incumplen la democracia, el imperio de la ley y los derechos fundamentales”.
Birgit Sippel, portavoz de Libertades Civiles, Justicia y Asuntos de Interior del Grupo S&D, afirmó:
“La pandemia de la Covid-19 ha llevado a la aprobación de leyes de emergencia en toda Europa, pero solo un gobierno de la Unión Europea puede gobernar por decreto, sin ninguna limitación de tiempo ni responsabilidad democrática: Hungría.
“La ley de emergencia de Hungría ha abierto la puerta a todo tipo de abusos, que Orbán y su partido Fidesz están ahora capitalizando. Si queremos evitar forrar los bolsillos de las fuerzas antidemocráticas de Europa, el Consejo de la Unión Europea tiene la capacidad de vincular la financiación de la Unión Europea a la adhesión a los valores esenciales de la misma y, finalmente, acordar un mecanismo que sea real y significativo de la Unión Europea respecto a la democracia, el imperio de la ley y los derechos fundamentales.
“Las peticiones que hemos trasladado a la Comisión Europea, el Consejo y el Partido Popular Europeo de responder a los reiterados ataques de Orbán contra la democracia y el imperio de la ley siguen cayendo en oídos sordos. ¿Cuántas libertades más deben recortarse antes de que el Consejo y la Comisión Europea hablen y actúen? ¿Qué más hará falta para que el PPE expulse a Fidesz de su grupo político?”
