En muchos países no europeos, los animales todavía sufren al ser sometidos a experimentos dolorosos para fabricar nuevos pintalabios o champús. Conejos, cobayas, hámsters, ratas y ratones pasan normalmente por esas pruebas, generalmente en experimentos relacionados con irritación cutánea y ocular.

La Unión Europea ha demostrado que estas pruebas crueles son innecesarias y por eso el Grupo S&D ha promovido una Resolución, que ha aprobado hoy el Parlamento Europeo, pidiendo una prohibición global de las pruebas sobre animales en cosmética y artículos de higiene.

La Unión Europea dejó de realizar pruebas de productos cosméticos sobre animales en 2004, y de ingredientes en 2009. A ello le siguió en 2013 una prohibición de la importación y venta de cualquier cosmético nuevo testado en animales en cualquier otro lugar. Sin embargo, el 80% de los países de las Naciones Unidas todavía permite que se realicen estas pruebas.  


La eurodiputada del Grupo S&D Miriam Dalli, que es autora de la Resolución, afirmó: 

“Cada año se usan más de medio millón de animales en pruebas de cosméticos en todo el mundo. Ese sufrimiento es innecesario y no es correcto. Los métodos alternativos de pruebas son muy avanzados, hasta el punto de que los métodos que no utilizan animales son más precisos. Las alternativas humanas a las pruebas en animales pueden incluir organismos simples como bacterias o tejidos y células humanas, así como modelos sofisticados de ordenadores. Sencillamente, no tiene sentido seguir causando un dolor injustificado a los animales.  

“La eliminación progresiva de las pruebas en animales es posible. Lo hemos demostrado en Europa. Ahora queremos que la Unión Europea promueva una prohibición global en base al Reglamento de Cosméticos de la Unión Europea. Europa ya ha respondido a las preocupaciones críticas de sus ciudadanos y ciudadanas, y estoy segura de que muchas personas fuera de Europa apoyarán una iniciativa internacional para acabar con esta crueldad.  

“Sabemos que no será fácil cambiar las normas y las regulaciones internacionales. Algunos Estados y regiones influyentes, incluyendo algunos miembros de la Cooperación Internacional en materia de Regulación de Cosméticos (ICCR, por sus siglas en inglés), todavía no cuentan con prohibiciones. 

“Esperamos que este asunto se incluya en la próxima reunión de la Asamblea General de las Naciones Unidas que tendrá lugar en Nueva York este mes de septiembre. Le hemos pedido a la Comisión Europea que considere la posibilidad de organizar eventos en paralelo a esta reunión para permitir el debate entre actores sobre los beneficios y los méritos de una convención internacional contra la pruebas de cosméticos en animales”.