Después de la decisión de hoy de la Comisión Europea de clasificar la COVID-19 como agente biológico de nivel 3, los Socialistas y Demócratas han anunciado que están buscando crear una mayoría en el Parlamento Europeo para rechazar la decisión de la Comisión Europea y garantizar que se ponen en marcha medidas estrictas de seguridad que permitan proteger a los trabajadores y las trabajadoras.
Agnes Jongerius, eurodiputada y portavoz de Empleo del Grupo S&D, afirmó:
“Nos oponemos firmemente a la decisión de la Comisión Europea de clasificar la COVID-19 solo como riesgo de nivel medio. La COVID-19 es el mayor desafío sanitario de nuestro tiempo. Especialmente para los trabajadores y las trabajadoras esenciales que están en primera línea, como enfermeras y enfermeros, empleados de tiendas de alimentación, conductores y limpiadores, que se exponen a mayores riesgos de salud y para su vida en el lugar de trabajo. Miles de ellos se han puesto enfermos; miles han muerto después de coger la COVID-19 mientras trabajaban para mantener seguras a nuestras familias y a nuestras comunidades conectadas. Ahora que millones de trabajadores y trabajadoras volverán a su lugar de trabajo, tenemos que asegurarnos de que también están adecuadamente protegidos y de que evitamos un segundo brote. Debido al alto nivel de propagación, y hasta que se pueda disponer de una vacuna o tratamiento, la COVID-19 debe considerarse una amenaza de la categoría más elevada 4, en línea con los criterios claros y vinculantes que se establecen en la misma Directiva.
“Esta decisión de la Comisión Europea ilustra de nuevo que los procedimientos establecidos en la Directiva sobre los Agentes Biológicos ni son democráticos ni transparentes ni están a la altura de los retos que plantea la pandemia. Darles a los Estados miembros cinco meses para poner en marcha medidas preventivas es irresponsable. No hay información pública disponible sobre los expertos consultados y su razonamiento. Ni los agentes sociales ni el Parlamento Europeo participaron en el proceso. Por eso estamos trabajando para crear una alianza en el Parlamento Europeo y así oponernos a que la COVID-19 se clasifique solamente como amenaza de nivel medio, e impulsar que se revise la Directiva para adaptarla mejor a los brotes pandémicos. La COVID-19 es una llamada de atención para intensificar los esfuerzos de seguridad y salud en el trabajo. Se lo debemos a todos los trabajadores y las trabajadoras que han puesto en riesgo su salud para servir a los demás durante esta pandemia, de forma que estén seguros en su lugar de trabajo”.
Nota para los redactores:
La comisión de Empleo votará sobre la decisión de la Comisión Europea de clasificar la COVID-19 como agente biológico del grupo 3, el 11 de junio; a lo cual seguirá una votación en el plenario del Parlamento Europeo en su sesión de junio.
El texto actual de la Directiva de Agentes Biológicos (BAD, por sus siglas en inglés) data de 2000, se revisó por última vez en 2019 y se transpondrá en noviembre de 2021; no incluye, por lo tanto, la COVID-19. En la BAD, los agentes se clasifican en cuatro grupos de menor peligro (grupo 1) a mayor peligro (grupo 4), y se facilitan criterios claros:
El Artículo 2 de la Directiva define un agente biológico del grupo 3 como “uno que causa una enfermedad humana grave y presenta un peligro serio para los trabajadores y las trabajadoras; puede presentar un riesgo de propagación en la comunidad, pero normalmente se dispone de profilaxis o tratamiento”.
El grupo 4 define un agente biológico “que causa una enfermedad humana grave y presenta un peligro serio para los trabajadores y las trabajadoras; puede presentar un alto riesgo de propagación en la comunidad; normalmente no hay profilaxis o tratamiento disponibles”.
