El miércoles, está previsto que el Parlamento Europeo dé su aprobación al acuerdo definitivo sobre ReFuelEU alcanzado por la Comisión, el Parlamento y el Consejo.
Esta ley constituye un paso fundamental de cara a reducir las emisiones en la industria de la aviación y adaptar el sector a los objetivos climáticos de la UE. Establece rigurosos requisitos para los proveedores de combustible, a los que exige que aumenten gradualmente la utilización de combustibles de aviación sostenibles (SAF) en todos los vuelos comerciales de Europa: de un 20% en 2035 a un 70% en 2050.
La iniciativa «ReFuelEU Aviation» se ajusta estrechamente a los valores y las prioridades fundamentales del Grupo S&D, en particular la protección de los derechos sociales y laborales, el incremento de los objetivos sobre la utilización de SAF y el fomento de los combustibles sintéticos, el hidrógeno y las alternativas eléctricas.
Erik Bergkvist, ponente del Grupo S&D sobre la iniciativa «ReFuelEU Aviation», ha declarado:
“Gracias a los incansables esfuerzos del Grupo S&D, el Parlamento Europeo va a dar luz verde a la integración progresiva de los combustibles de aviación sostenibles en el sector de la aviación. Este voto afirmativo supone un hito importante en nuestro empeño por transformar la industria de la aviación —en su momento uno de los sectores más contaminantes de la UE— en un modelo de responsabilidad ambiental.
Esta ley resulta vital ya que constituye un pilar fundamental del paquete de medidas «Objetivo 55» y es la primera legislación de la UE en materia de combustibles de aviación. Nos acerca un paso más a la consecución de nuestras ambiciones climáticas, al tiempo que contribuye a mejorar la conectividad y la cohesión regionales dentro de la UE”.
Petar Vitanov, coordinador del Grupo S&D en la comisión de Transportes y Turismo, ha añadido:
“Nuestro objetivo está muy claro: abrir paso a una nueva era de sostenibilidad y responsabilidad ambiental en los combustibles de aviación. Con la adopción de este informe, estamos allanando el camino a unos combustibles de aviación sostenibles con capacidad para reducir la huella de carbono durante el ciclo de vida del combustible de aviación en un nada desdeñable 80%. Se trata de un objetivo ambicioso, sobre todo si tenemos en cuenta que, en la actualidad, los combustibles de aviación sostenibles representan menos del 0,1% del consumo total de combustibles de aviación”.
