El pleno del Parlamento Europeo ha debatido hoy sobre la forma en la que debe responder la Unión Europea a las consecuencias sociales y económicas de la guerra contra Ucrania, a petición de los Socialistas y Demócratas. La presidenta del Grupo S&D, Iratxe García, ha incidido en la necesidad de rebajar las facturas que pagan la ciudadanía y las empresas, y ha propuesto una serie de medidas que incluyen gravar los beneficios inesperados que han obtenido las empresas que se benefician de la crisis.
Iratxe García dijo:
“Ahora mismo, nuestras políticas deben centrarse en que la gente pueda pagar sus facturas. Nadie debe tener que preocuparse por estar obligado a elegir entre encender la calefacción o pagar la comida.
“La Unión Europea necesita una capacidad presupuestaria permanente, y también que un instrumento de seguridad laboral, como el SURE, que se puso en marcha durante la pandemia, sea permanente. Esta crisis exige redes de seguridad social fuertes y eficaces. Una parte de las mismas puede financiarse mediante la aplicación urgente de un impuesto sobre los beneficios que han caído del cielo y un impuesto mínimo para las multinacionales, y no solamente para las empresas del sector energético. No puede ser que pidamos solidaridad exclusivamente a las familias y a las PYMES (pequeñas y medianas empresas); las empresas que se benefician de la crisis deben pagar asimismo su parte.
“Es hora de reformar en profundidad los mercados energéticos con la finalidad de reducir nuestra dependencia de Putin y de los combustibles fósiles, en general. Celebro las medidas que ha anunciado hoy la Comisión Europea para reformar el mercado energético. Llevamos meses reclamando estas medidas. Pero no basta. El plan que busca desvincular el precio del gas de la electricidad es demasiado frágil, mientras que la propuesta de establecer un tope dinámico al precio del gas se retrasa hasta finales del próximo año –cuando no tenemos tiempo que perder– y resulta demasiado vaga en cuanto a los criterios.
“Tenemos una lista de reformas que aliviarían el dolor de los ciudadanos y las ciudadanas, y reequilibrarían la carga de la crisis, y esperamos que la Comisión Europea y los Estados miembros trabajen conjuntamente con este Parlamento Europeo en brindar soluciones. Es inaceptable que la Comisión Europea presente sus propuestas legislativas a través del artículo 122 del Tratado, cuya utilización está pensada solamente para medidas temporales y excepcionales. Se requiere una base jurídica distinta para la contratación conjunta: dejar de lado al Parlamento Europeo en esta medida fundamental es indignante y una falta de respeto a los ciudadanos y las ciudadanas de la Unión Europea. El Parlamento está dispuesto a trabajar con carácter de urgencia, como hicimos en el pasado con la crisis de la Covid-19, y queremos hacerlo ya”.
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