Los eurodiputados y las eurodiputadas del Grupo S&D han pedido hoy que se elimine la norma de no gastar más del 1% del PIB (Productor Interior Bruto) en el presupuesto de la Unión Europea. La petición llega antes de la votación de una Resolución sobre la futura financiación de la Unión Europea, en el Parlamento Europeo, reunido en Estrasburgo.

La vicepresidenta del Grupo S&D y autora de la Resolución, Isabelle Thomas, afirmó:

“Esta Resolución pide un ambición real sobre el futuro de la Unión. Queremos reforzar el presupuesto de la Unión Europea después de 2020 para poder abordar los muchos desafíos que afrontamos en Europa. Finalmente, debemos romper el techo arbitrario de solo gastar el 1% del PIB europeo en el presupuesto de la Unión Europea. También debemos encontrar nuevas formas de financiar el presupuesto de la Unión Europea, dependiendo menos de las contribuciones de los Estados miembros y más de recursos propios genuinos. Esos nuevos fondos deben proceder de una amplia variedad de medios, como el impuesto a las transacciones financieras, un impuesto a las multinacionales o un impuesto de adaptación del carbono en las fronteras de Europa.

“Ahora le pedimos a la Comisión Europea que elabore una propuesta en línea con las propuestas que ha presentado el Parlamento Europeo. Si no somos serios sobre la financiación apropiada del presupuesto de la Unión Europea, entonces ponemos en riesgo el futuro de la Unión. Los Socialistas y Demócratas están en primera línea en esta batalla financiera”.

Eider Gardiazábal Rubial, portavoz del Grupo S&D para el Presupuesto de la Unión Europea, añadió:

“De responder a la crisis migratoria a abordar el paro juvenil, los gobiernos nacionales le están pidiendo a la Unión Europea que asuma incluso más tareas. Estas políticas pueden ser efectivas, pero solo si contamos con medios para gestionarlas apropiadamente en el presupuesto de la Unión Europea. El Parlamento Europeo ha dejado claro hoy que, si queremos ser ambiciosos en relación con lo que la Unión Europea puede lograr, entonces debemos ser realistas sobre cómo financiarlo. En este informe, estamos pidiendo un presupuesto específico de la zona euro, así como más fondos y flexibilidad para tener la capacidad de responder efectivamente a los nuevos retos y las nuevas prioridades conforme vayan surgiendo”.

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