El Reglamento que se ha aprobado hoy debe crear gradualmente un sistema unificado de clasificación (“taxonomía”) acerca de lo que puede considerarse una actividad económica que sea medioambientalmente sostenible en Europa. Es uno de los tres informes del Plan de Acción de la Unión Europea para integrar los factores Ambientales, Sociales y de Gobernanza (ASG) en la toma de decisiones sobre las inversiones, junto a un Reglamento para que la información sobre las inversiones sostenibles y los riesgos de sostenibilidad sea más clara –un informe liderado en el Parlamento Europeo por el eurodiputado del Grupo S&D Paul Tang– y a un informe de la eurodiputada del Grupo S&D Neena Gill, que establece parámetros de bajo carbono y que se ha aprobado hoy.

 

Los Socialistas y Demócratas consideran que este Plan de Acción es un instrumento esencial para la transición justa hacia una economía sostenible y un modelo social que no deje a nadie atrás, y seguiremos luchando por una mejor regulación final del sistema de clasificación.

Simona Bonafè, negociadora del Grupo S&D para la creación de un marco jurídico que facilite inversiones sostenibles, afirmó: 

“Hace falta un marco jurídico consistente para las inversiones que acelere la transición hacia un sistema económico que sea más sostenible. Con la votación de hoy, el Parlamento Europeo defiende la inclusión de todos los productos financieros en el ámbito de la normativa y aprueba avances significativos en relación con la medición de la sostenibilidad medioambiental. Además, finalmente hay claridad en cuanto a la exclusión de los combustibles fósiles sólidos del ámbito de las inversiones sostenibles.

“Sin embargo, se ha perdido la ocasión de incluir la dimensión social en la taxonomía sostenible –que ha sido apoyada una vez más en el debate en plenario y las votaciones por nuestro Grupo– debido a la fuerte oposición de los grupos conservadores. Este Reglamento es solo el primer paso en la senda de unas finanzas sostenibles; seguiremos con nuestra lucha para incluir los factores ASG en todo el proceso”.

La eurodiputada Elena Gentile, que es la negociadora del Grupo S&D en la comisión de Medio Ambiente, afirmó: 

“Hemos conseguido reforzar las disposiciones sobre la mitigación del cambio climático y la economía circular en el texto. Sin embargo, no pudimos proteger los aspectos sociales de la nueva legislación. Es hora de que los liberales y los conservadores entiendan que los ciudadanos y las ciudadanas no deben pagar el precio de la codicia industrial y los riesgos asociados con el cambio climático. Esperemos que una Unión Europea más progresista en la próxima legislatura asuma nuestra lucha para garantizar que la sostenibilidad económica y medioambiental van de la mano con el bienestar y la prosperidad de los ciudadanos y las ciudadanas de Europa”.