El Parlamento Europeo ha adoptado hoy un informe liderado por el Grupo S&D que reforzará las competencias de las autoridades nacionales para aplicar los derechos de los consumidores. El Reglamento sobre Cooperación en materia de Protección de los Consumidores de 2004 creó métodos efectivos de cooperación entre las autoridades públicas responsables de proteger los derechos de los consumidores y las consumidoras, pero el crecimiento del comercio transfronterizo y el comercio electrónico hizo necesaria la reforma de las normas.

Olga Sehnalová, eurodiputada del Grupo S&D y autora del informe, afirmó:

“Las nuevas normas reforzarán la cooperación transfronteriza entre autoridades para aplicar mejor las normas de protección del consumidor. Dado el crecimiento del comercio electrónico y el comercio transfronterizo, esta reforma es clave para empoderar a los consumidores. Se dará a las autoridades nacionales competencias de mayor alcance; podrán imponer multas y pagos de sanciones, comprar mercancías y servicios con una identidad encubierta o buscar compromisos de los comerciantes para ofrecer reparaciones apropiadas a los consumidores que han sufrido un perjuicio.

“Estoy contenta de que fuéramos capaces de impulsar el papel que han desempeñado las organizaciones de consumidores en todo el mecanismo. Las organizaciones de consumidores podrán ahora publicar alertas y ser activamente consultadas por las autoridades relevantes o por la Comisión Europea, tanto durante la investigación como en la fase de aplicación. Las nuevas normas también refuerzan el papel de la Comisión Europea en la acción coordinada contra un operador económico que sea inadecuado, concretamente en casos de infracciones generalizadas que dañen los intereses colectivos de los consumidores al menos en dos tercios de los Estados miembros de la Unión Europea, que representen al menos a dos tercios de la población de la Unión”.  

El portavoz del S&D para Mercado Interior y Protección del Consumidor, el eurodiputado Nicola Danti, añadió:

“Las nuevas normas vuelven apta la protección del consumidor en la era digital. Los consumidores deben poder comprar con confianza en línea, incluyendo más allá de sus fronteras. La votación de hoy es un paso positivo para garantizar derechos fuertes y ejecutables de los consumidores y las consumidoras en la Unión Europea”.