Liderada por el comisario de Derechos Sociales de la Unión Europea, Nicolas Schmit, la Comisión Europea ha presentado hoy su propuesta, que se esperaba desde hace muchísimo, sobre una Directiva de salarios mínimos dignos. El Grupo S&D ha estado pidiendo una propuesta así durante muchos años y la iniciativa forma ahora parte del Programa de Trabajo de la Comisión Europea. La lucha contra la pobreza a pesar de tener trabajo y por salarios dignos es particularmente importante entre las mujeres y los jóvenes.

Comentando la propuesta, la presidenta del Grupo S&D, Iratxe García Pérez, afirmó:

“Celebramos la propuesta de la Comisión Europea sobre salarios mínimos dignos. El apoyo de nuestro Grupo a Ursula von der Leyen estuvo condicionado a la implementación de una agenda social fuerte y esta propuesta es uno de los elementos clave que hemos pedido porque simplemente no podemos aceptar que haya “pobres que trabajan” en la Unión Europea. Cada trabajo merece un salario digno. La introducción de salarios mínimos que sean dignos en la Unión Europea son buenas noticias para todas las personas que luchan por sobrevivir con salarios bajos y los más afectados por la crisis de la Covid-19, que en su mayoría son mujeres.

“El Grupo S&D está liderando los esfuerzos de cambio de la política económica de la Unión Europea, con preocupaciones macroeconómicas, a la vida diaria de la gente. Por eso hemos estado insistiendo en reforzar el pilar social, en un momento en el que debemos facilitar una respuesta sustancial e inclusiva a la crisis y no podemos ver los resultados de nuestros esfuerzos cuando es preciso. Estoy contenta de que esta vez no estemos solos. A diferencia de la crisis de 2008, las instituciones de la Unión Europea han aprendido de los errores: que no haya más austeridad irracional, que no se vuelva a hacer que los más vulnerables paguen el precio con reducciones salariales, ni con recortes de los derechos sociales.  

“Junto a la convergencia socioeconómica ascendente, el comisario Nicolas Schmit también ha garantizado un buen equilibrio para aquellos Estados miembros donde los salarios se fijan por negociación colectiva. Debemos garantizar que las prácticas nacionales que han demostrado ser un éxito en cuanto a los derechos de los trabajadores no se vean afectadas de ningún modo y, al mismo tiempo, debemos aprovechar esta oportunidad para reforzar el diálogo social y el papel de los sindicatos en nuestras sociedades”.

Agnes Jongerius, portavoz de Asuntos Sociales y Empleo del Grupo S&D, afirmó:

“Europa está tomando un nuevo camino. El paradigma se está alejando de la competencia de los salarios y yendo a la convergencia social ascendente. Estamos construyendo la presa que protegerá a los trabajadores y las trabajadoras frente a las presiones de sueldos más bajos. Al mismo tiempo, estamos trayendo un avance salarial positivo al incluir a más trabajadores y trabajadoras que están en convenios colectivos. La Directiva propuesta está fijando criterios que deben cumplirse sobre los salarios legales mínimos.

“Lucharemos para garantizar que los trabajadores y las trabajadoras ganen, al menos, el 60% del salario promedio y el 50% del salario medio donde existan salarios mínimos legales. Los trabajadores tendrán más certidumbre. En primer lugar, en relación con los Estados miembros, que tienen que garantizar que se pagan salarios mínimos en la contratación pública y los salarios que se hayan negociado colectivamente. En segundo lugar, cuando los trabajadores y las trabajadoras tengan derecho a indemnización y, en tercer lugar, cuando deban tomarse medidas contra el anti-sindicalismo. ¡El cambio social empieza aquí!”

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