El Grupo S&D ha liderado hoy a una amplia coalición de múltiples partidos para garantizar que no existan productos, ni consumidores o consumidoras, de segunda categoría en la Unión Europea. Con esta votación, el Parlamento Europeo ha reconocido la existencia de la doble dualidad en alimentos y otros productos del consumidor, una práctica que se refiere a la venta de productos que son aparentemente idénticos, pero menor calidad, en algunos países europeos. Es una lucha que el Grupo S&D ha estado peleando incluso antes de que el problema fuera objeto de debate público.
La autora del informe del Parlamento Europeo sobre la doble calidad de los productos, la eurodiputada del Grupo S&D, Olga Sehnalová, afirmó:
“Como ponente, estoy muy contenta de que el Parlamento Europeo haya votado mayoritariamente a favor del informe de la doble calidad de los productos. Después de siete años, las instituciones de la Unión Europea reconocen finalmente que existe una doble calidad de productos y que es un problema real que afecta a la vida de millones de ciudadanos y ciudadanas de la Unión Europea.
“La venta de productos y alimentos de mejor calidad en algunos Estados miembros, pese a que el envase y la marca parezcan aparentemente idénticos, es inaceptable. Es una práctica comercial injusta que debilita la confianza de los consumidores y el funcionamiento del Mercado Interior. Los productos de la misma marca y con el mismo envase deben tener la misma composición en toda la Unión Europea. Las preferencias del consumidor ya no pueden ser una excusa cuando hay diferencias de calidad flagrantes.
“Para nosotras y nosotros, los Socialistas y Demócratas, no puede existir un trato discriminatorio entre este y oeste, norte y sur. Los alimentos y otros productos que consumimos en Praga y Sofía no pueden ser de menor calidad que los de Berlín y Estocolmo. Todos los consumidores y las consumidoras europeos, independientemente de su país de residencia, se merecen ser tratados equitativamente y de manera igual. Con esta finalidad, le pedimos a la Comisión Europea que revise urgentemente la Directiva sobre las prácticas comerciales desleales. ¡Hay que acabar ahora con la práctica de “una marca, un producto, distinto contenido y composición!”
La eurodiputada Biljana Borzan, negociadora del Grupo S&D en nombre de la comisión de Medio Ambiente y Salud, añadió:
“Numerosos estudios de la Unión Europea muestran que productos alimentarios que son aparentemente idénticos pueden ser de menor calidad y menos sanos en países de Europa oriental. Se ha demostrado que las cremas de chocolate, los yogures, los refrescos, etc. contienen ingredientes de distinta calidad, aunque les parezcan idénticos a los consumidores y las consumidoras. Es injusto y potencialmente peligroso.
“No deben existir ciudadanos y ciudadanas de segunda clase en la Unión Europea. Las empresas no pueden mantener sus prácticas de seguir actuando como siempre y poner en riesgo la salud de los consumidores europeos. No debe existir este y oeste en este tema; todos somos una Unión. Hoy enviamos un mensaje claro de que puede que no todos seamos lo mismo, pero todos somos iguales en la Unión Europea”.
